miércoles, 7 de octubre de 2009

Lecturas veraniegas I

Y otra entrada sobre cosas que he hecho este verano y que no han sido Digimongo. En fin, tampoco es que me haya hartado a leer, si eso unos pocos libros y algún que otro cómic... En fin, vamos allá.

Introducción a la Economía (J. K. Galbraith): me apetecía leer algo sobre economía, algo que me diese una idea sobre lo que ya anduve "estudiando" en bachiller, pero... qué cosa. Me encontré con una serie de entrevistas del ácido y dicharachero Galbraith, donde respondía una serie de preguntas sobre la evolución económica desde la segunda guerra muendial hasta la segunda crisis de los setenta. Me quedé casi en las mismas, pero me ha incentivado a tratar de leer algo más de este señor.

La sociedad del riesgo global (U. Beck): un libro de denominado por mi profesor de mundo actual "el sociólogo de moda en Europa" que trata sobre la tesis sociológica de la década anterior y la presente, la sociedad del riesgo global, tesis que se encuadra en el marco neoliberal del mundo globalizado y asumido por la individualización. Tesis interesante sobre la que incidir y acabar desbrozando.

El socialismo (E. Durkheim): ¿un clásico de la sociología hablando sobre el socialismo? Eso es el primer tercio del libro, bastante interesante. Luego ya empezamos con los discusos sobre la teoría de Saint-Simon, los dos tercios restantes, y se hace bastante aburrido. Eso, me acabé aburriendo de él y ahí lo dejé aparcado.

Arrugas (Paco Roca): de lo poco de cómic que he leído este verano. Recomendación directa del crítico Álvaro Pons, quien contaba, merecidamente, maravillas de esta obra. Una tierna historia sobre un hombre mayor cuyos hijos deciden internar en un asilo porque éste comienza a padecer los primeros síntomas de alzheimer. Así, vemos cómo conforme se va haciendo dicha enfermedad con él, vive una serie de sucesos, unos más disparatados que otros, en la residencia en la que está internado. Una historia muy bonita y bien narrada, que se hace corta, pero que sin duda se comprende perfectamente por qué ganó el premio nacional de cómic del año pasado. Un imprescindible.

El último judío (Noah Gordon): hacía bastante tiempo que no leía un anovela, y me decanté por esta novela histórica que estaba en las estanterías del pueblo. La obra nos cuenta las vivencias de Yonah, un joven judío que tiene que sobrevivir vagando por la ancha Castilla de finales del siglo XV y principios del siglo XVI después del edicto de expulsión de los judíos, siendo el mismo aún judío. Así, sufre toda clase de contradicciones y vicisitudes que le forjan como persona, mientras trata de desvelar los misterios que entrañaba el misterioso asesinato de su hermano y clama venganza por lo que le sucedió a los de su religión. Un desarrollo interesante que hace que se lea rápido, pero o deja de ser un mero producto comercial de entretenimiento de masas mejor logrado que otros, eso sí, pero que no propugna por nada nuevo. Otro best seller de temática histórica.

Cristianos y marxistas: problemas de un diálogo (coord. Jesús Aguirre, VV.AA.): un librito que recoge una serie de reflexiones de teólogos, filósofos, historiadores y politólogos que hablan acerca de la relación entre las ideologías marxista y cristiana en diversos aspectos. Libro con bastante carga filosófica y política, aunque incidiendo en una problemática algo superada, pues han pasado unos 40 años desde la publicación de la mayoría de los artículos que en sus páginas se encuentran. Aun así, es una lectura interesante para hacerse una idea de la problemática que suscita dicho tema.

La broma asesina (A. Moore y B. Bolland): los orígenes del archienemigo del hombre murciélago explicados por Alan Moore. No llega a ser otro Watchmen ni mucho menos, pero nos da una idea del origen de la personalidad de un escatológico Joker, el retorcido rival de Batman, a quien se enfrenta en esta oscura y a la vez demasiado corta obra con una despiadada actitud hacia sus tradicionales némesis. Muy recomendable.

King of Thorn (Y. Iwahara): curioso manga con tintes a lo Resident Evil y Silent Hill que cuenta la historia de una serie de personajes encerrados en una cámara frigorífica que despiertan de su letargo rodeados de criaturas monstruosas y luchan por sobrevivir a pesar de tener una extraña enfermedad que va secando sus células hasta convertirles en piedra. Poco a poco, se irán desvelando los secretos de los personajes y sabrán más acerca de lo que ha sucedido y la relación con su misteriosa enfermedad. La historia empieza tremenda, y va ganando aliciente en un agobiante desarrollo digno de los mejores juegos y películas de terror, aunque en los últimos capítulos pierde un poco de fuelle. Aun así, es altamente recomendable. Aparte, parece ser que en Sitges se estrenará la película de Sunrise que adapta a este manga. Tráiler.

En fin, creo que esto es todo. Nos vemos en próximas entradas.

3 comentarios:

Dufraine314 dijo...

La Broma Asesina me gusto aunque me parecio un tanto extraño, el final fue un rollo anti-climax, pero sigue siendo una peculiar vuelta de turca a unos personajes clasicos.

Un saludo

Djevel dijo...

El señor Galbraith es buenísimo. Si realmente te gustó este libro y quieres leer algo más de él, te recomiendo "Historia de la economia" y "Naciones ricas, naciones pobres".

Te los recomiendo.

Paco Martín Blázquez dijo...

@Dufraine314: tienes bastante razón. Deja con un sabor de boca un tanto extraño, pero aun así mola bastante.

@Djevel: ahí tengo también "La sociedad opulenta" esperando, aunque creo que ya me va a cumplir el plazo de devolverlo a la biblioteca y aún no le hinqué el diente por estar leyendo un libro sobre la baja edad media de LeGoff xD Habrá que pillarlo en otro momento, pero también tendré en cuenta tu recomendación.