martes, 1 de diciembre de 2009

ToraDora!: Troll + Drama


Slowpoke anime reviews strikes back. Y esta vez con uno de los peces gordos del año pasado, nada más y nada menos que ToraDora! (tigre-dragón). Resta decir que quien no la conozca a estas alturas de la película vive debajo de una piedra. Y la verdad, en cierto sentido, me alegro de no haberla visto cuando tocaba, si no me tocaba verla dos veces como otros muchos casos se han dado (cosas de índole fansuberil). Lo primero a destacar es que esta serie ha sido de capaz, a pesar de su oversubbeo, de juntar a dos de los grandes fansubs en castellano (según la crítica) para hacer una versión que he revisado personalmente (y eso no es que le dé ninguna categoría de calidad o algo, pero vamos, que ahí he estado metido "en su puesta a punto"). En fin, egolatradas aparte, pasemos a hablar un poco de la serie y la impresión que me ha causado.

La serie comienza como una típica comedieta de romance que tanto abundan ahora mismo en el panorama de la animación japonesa, siendo una serie de JC Staff y con su ídolo ahí como seiyuu protagonista de nuevo en el papel de una enana tsundere sin tetas. Asío, resulta que conoce a un chaval con cara de mastuerzo que en el fondo es un cacho de pan al cual le gusta su mejor amiga, pero a la par a la enana chillona le gusta el mejor amigo del chaval. Total, tigre y dragón se compenetran para conseguir ambos sus objetivos amorosos. Hasta que la cosa empieza a torcerse y a degenerar sobremanera, transformando a los personajes radicalmente. Podría dedicar otra entrada entera a la evolución de los cinco personajes más destacados, pero en fin, eso sería prolongar esto lo improlongable, y quiero tirar por otros derroteros. Total, la trama pasa a denominarse "drama" por unos, "deep" por algunos, "troll" por otros, "shit" por los más radicales (y quizás los que más se acercan a la realidad...). En fin, que del batiburrillo de opiniones se saca en claro "trolladorama". Enfocándose así, puede parecer que la cosa es intragable y que la cosa pasa de ser una entretenida y agradable comedieta romántica a un culebrón venezolano de sobremesa. Y como ya sabemos todos, no puedo evitar caer en la tentación de dichos culebrones, y acabé enganchado a la serie. Quizás por otras razones que me pondré ahora mismo a justificar, que luego se me tiran las piedras sin haber soltado palabra.

La razón fundamental por la que es odiada y detestada esta serie seguramente es por su giro dramático, abusivo para mi gusto, pero significativo en el desarrollo de la serie. Parece ser que el final ha sido de nuevo invento del estudio, así que poco tiene que ver con el de las novelas en que se basa dicha serie. Aunque también hay manga y VN con finales más... alternativos. La cosa es que este cambio nos muestra, de forma siempre muy exagerada, lo que tiene ser un adolescente. Aparte del aliciente de disfuncionalidad familiar que le meten al caso de nuestros dos protagonistas, también cabe destacar que, salvando las distancias con la realidad, se tocan temas que los chavales de instituto suelen tener siempre presente, al menos, los chavales que no son de esta grotesca generación "nini" (ni estudian ni trabajan) y que forman parte del pensamiento débil borregil del panorama de la globalización que impera en el mundo estos días. Si hay inquietudes, surgen este tipo de problemas, y más si hay rollos amorosos de por medio, que la gente tiende a idealizar, y que en el fondo lo que hacen normalmente es agravar esa sensación de "¿qué hago yo aquí?". Aunque claro, siempre es más fácil acabar viviendo como un "simple mind" que tratar de hacerse preguntas de un tipo algo más existencialista. A mí me pasaba, y ahora gracias a ello, esty bastante corroído por los debates epistemológicos en torno a la teoría del conocimiento y la realidad (gracias señor Feyerabend por torturarme por las noches). Lo que vengo a decir prioritariamente es que, siempre y reitero esto de siempre salvando las distancias, esta serie es un reflejo bastante acertado de la mentalidad que los adolescentes, al menos desde mi punto de vista, suelen tener. Es difícil ser joven. Dicen las buenas lenguas que serán los mejores años de tu vida. Permítanme objetar: una polla. Cierto es que si hay inquietud, hay sufrimiento por saber qué va a ser de mí cuando todo esto acabe. La cosa está muy mala y no exagero. Al menos mi panorama es bastante oscuro, lo sé de primera mano porque en estos años me estoy jugando mucho y soy terriblemente consciente de ello. No es algo que precisamente sea una cosa para disfrutar y olvidar, que luego llegan los llantos después de las risas. Así que nada, tocará hacer de tripas corazón y seguir desviviéndose por un incierto futuro mejor.

Vuelvo a incidir que todo esto no es más que una percepción absolutamente subjetiva de la realidad por mi parte. ¿Me equivoco y exagero? Muy posiblemente, pero prefiero afianzarme ahora antes de que se me caiga el mundo encima. Y es muy pesado. Así que yo recomiendo tomarse las cosas un poco más en serio y no acabar siendo adicto al gran hermano y a hacer de tu vida social el botellón y la discoteca. En fin, me ha salido más una declaración de intenciones (otra vez) que una reseña de una serie de dibujos japonesa. Bendita juventud y maldito neoliberalismo.

3 comentarios:

Djevel dijo...

Dos cosas:

1) Pues mira, me ha gustado muchísimo más tu declaración de intenciones que la parte de reseña. Sobre la serie, no le he visto ni tengo, ni tenía ni tendré ganas de verla. Son muchas las series buenas que están escondidas y que esperan ser descubiertas, no perderé el tiempo con pollas de estas

2) Y sí! Fuck neoliberalism! Y fuck a la posmodernidad!!

Cuidese Mr. Fausto

Victorysaver dijo...

Josu como estamos, eh??

Bueno, veo que no soy el único que eso de "los mejores años de tu vida" le parece una suberana mentira, sobre todo porque un servidor nunca a sido de discotecas y botellones, por lo que la Uni era simple y llanamente un lugar para estudiar y forjarme un futuro, el cual actualmente es bastante oscuro y su "brillantez" depende de aprobar unas oposiciones.

En cuanto a la serie, hombre, inicialmente es agradable de ver, el problema es cuando pasa de la comedia al drama y encima un drama bastante mediocre.
Además tirando para mitad de la serie, dos de los personajes principales pierden casi todo su peso y subren un cambio de personalidad un tanto inexplicable y a peor.
Sobre el final de las novelas, pues no tengo ni repajolera idea, a ver si lo encuentro por lo menos por curiosidad. Eso sí, el del juego de PSP ha traido cola porque la prota sale embarazada (teniendo en cuenta que los dos andan por lo 16, creo, la inestabilidad familiar de ambos, como esta la sociedad actualmente y sus perspectivas lavorales y que la enana pare tener 10 años...)

P.D.: pasate por Go Fansub que Muerte te quiere comentar algo sobre Ashita no Joe.

Anónimo dijo...

escribes bastante bien. pero tu percepcion de la realidad es demasiado radical y exagerada para mi gusto.
Toradora es una historia (con muchos defectos) pero la evolucion de los personajes no es uno de sus defectos.
Darte cuenta de que te gusta alguien es algo que me ha pasado a mi y a mucha gente y no soy precisamente adolescente.
Un saludo ^^