domingo, 8 de julio de 2007

¿Para qué sirve un palo?

En la vida, hay de todo. Y claro está, la retórica de la preguntita que os he sugerido como título tiene su leyenda, sucedida antes de llegar yo a mi casa, escribir esto, y fliparlo intentadno asimilar medio borracho y casi a las 8 de la mañana.

Pues nada: 7 de julio, Nana Day, y otra fiesta que no sé cual era (el tanabata, si mal no recuerdo), que empezó con la bucólica acción de lanzar nuestros deseos al río mientras encendíamos bengalas. Fiesta chupi guay que no me hizo ni puta gracia, hasta las 4 de la mañana, 2 tintos de verano y sin cenar. Entonces, a esa hora apareció un colega al que le agradeceré eternamente esta noche. Me arrastró con él a la plaza de Gracia, y nos sentamos con unos litros. Simplemente observando los acontecimientos, remarco que fue una de las noches más exóticas que he vivido en toda mi maldita existencia.

Todo comenzó con un paseíto y unas presentaciones (que vaya sujetos más curiosos son los presentados xD), y una sentada en el banco, con mera observación se dedujeron grandes aspectos: fallos de Matrix con un gato, pijas borrachas, yonkis diversos y variopintos que nos pedían "tema"... un espectáculo por el que uno no se puede perder las calles granadinas en un fin de semana por la noche. Colosal. Pijas medio borrachas autoproclamánose las reinas de la noche, mientras se marean en los columpios, historias y anécdotas, batallitas y demás... un señor desfase xD Después llegó más gente, seguimos a lo nuestro, más pípol, más nenas, más yonkis; total, unas muchachas nos piden cerveza, acabando de salir de una disco fashion de mierda (la Kapital ésa, si mal no recuerdo), y nos presentan a sujeto esperpento nº1, al que denominaremos "Ra". Acento afeminado, posturas amaneradas, y lo más importante: camisa rosa. Conclusión: marica xD El caso es que el sujeto nos estaba diciendo que se había tirado 2 horas ligando con una de inglés o algo así, y todos pensamos lo mismo: "por aquí tararí". Pasa un rato, viene un colega más, y empieza lo bueno...

Dos calorros colgaos que salen de la disco fashion de los huevos vienen a pedirnos tabaco. Craso error, uno de nosotros conocía a uno: pelo para arriba engominado, oros cubriendo cada una de sus muñecas, cuellos y dedos, camisa prieta marcando sus pezones, acento de retrasado mental... un gilipollas en toda regla, vamos. Se nos acopla y empieza a pedirnos droga, como viene siendo costumbre durante toda la noche. Y justo empieza a tocar la moral, pues decide replegarse, dejándonos a todos con las ganas de quebrarle la mollera. Vale, nada malo, al revés, mejor. Pero el caso es que parece quew ahn aparecido unos colegas suyos, y quieren empezar lío. Nosotros seremos unos 8 ó 9, ellos creo que 3. Nos armamos con las litronas vacías, y a esperar reacción. Deciden ir a incordiar a unas pobres muchachas ajenas al tema, y uno de los nuestros se exalta por dicha acción. Finalmente, llega el momento más épico de la noche. Rondan las 6 de la madrugada, y el calorro empeiza a vacilarnos. Cruelmente virulento, un espectáculo digno de la mejor feria de los horrores, tanto visual como sonoro. Simplemente esperpéntico. Otro colega recogió lo que parecía el poste de una señal doblado, y el gran calorro de camisa prieta y abundante ornamentación áurea comenzó su recital de prendas lingüísticas: "¿pero qué vah a hasehnoh con ezo?" "Illo yo voy a manoh dehnúah...; y nuestra favorita de la noche: "¿Pa'qué cirve un paro? ¿Ezo eh una dusha? Páttelo por ra mitah..." Evidentemente, lo echaron sus propios amigos por la cantidad de incongruencias escatológicas a las que éramos vilmente sometidos por su afinada mente curtida a base de rallas, porros, y "tema". Pero nuestros camaradas, curtidos en mil batallas de ese estilo, decidieron no intervenir. Fuimos a hablar con las muchachas, y hasta parecían majas. Eran de Benidorm y del Zaidín, curiosa combinación...

Ya regresando cada uno a casita, a la par que preguntábamos "¿para quñe sirve una valla?", nos topamos por el camino con Heidi, y parados para hablar con los héroes de la noche para rememorar batallitas, nos vimos de nuevo con las muchachas del Zaidín xD Bien, ya de vuelta a casa, sacamos una conclusión filosófica de todo, y es la pregunta que da nombre a esta bonita historia con final feliz: "¿Para qué sirve un palo?" Pensadlo detenidamente "hamij@s", os dará más de un quebradero de chota... Y que paséis unos buenos sanfermines :)

Y al final la Alhambra no ha salido ganadora... demonios, debí hacer la propaganda con Haruhi hace 3 meses, no cuando faltaba un día... xD

3 comentarios:

Anónimo dijo...

IM-PRESIONANTE.

Anónimo dijo...

"Pues nada: 7 de julio, Nana Day, y otra fiesta que no sé cual era (el tanabata, si mal no recuerdo), que empezó con la bucólica acción de lanzar nuestros deseos al río mientras encendíamos bengalas. Fiesta chupi guay que no me hizo ni puta gracia, hasta las 4 de la mañana, 2 tintos de verano y sin cenar. Entonces, a esa hora apareció un colega al que le agradeceré eternamente esta noche."

Pos me alegro de tener amigos como tu, q dicen las cosas en un blog q no lee nadie, no t preocupes q como no t vamos a volver decir de kedar no tendras q pasar x un infierno pa ello, xao pako, me esperaba mas de ti sincerament

Paco Martín Blázquez dijo...

...

Creo que esto merece una explicación, aunque creo que van a seguir las cosas así... No voy a soltar el típico "esto no es lo que parece". Sí, he cometido un error. Y un error muy grave. Aun sabiendo y siendo consciente de que muy posiblemente esto te llegaría a doler bastante, lo puse. ¿Por qué? No me pidas razones. Estaba eufórico de los momentos posteriores con amigos que hacía tiempo que no veía, casi después de los exámenes, y sinceramente, sabes que ese ambiente nunca me fue bien. Pero decir que siempre que he ido a cualquier lado con vosotros me lo he pasado genial, ya fuese teniendo que pasar por lo que pasamos y pasáis. Siento profundamente el haberos ofendido de esta manera y realmente lo que más siento es que creáis que no podéis confiar en mi tras esto. Quisiera pedir una oportunidad. Sólo una . Pero entenderé que no me la queráis dar. Sé que no valdrá ningún argumento, que el daño ya está hecho, y todo eso. Pero quisiera que supieseis que para mí habéis sido unos amigos a los que siempre he apreciado y que a los que nunca me ha importado ayudar o tratar de contentar en la medida de lo posible. Siempre que necesitaba ayuda, estabis ahí. Siempre que necesitabais mi ayuda, yo estaba allí.

Creo que después de todo lo que hemos pasado, este no es el fianl más indicado. Y me gustaría decir que posiblemente no habría llegado a donde estoy si no fuese también por vosotros. Si de verdad hay algo que posiblemente no me deje dormir más aparte del calor, es que por este fallo mío del que me arrepiento con todo mi corazón, tengamos que separarnos. Sinceramente, creo que si lo hablamos detenidamente en otro momento, espero que podamos solucionarlo de la mejor manera, no ya para mí, sino para vosotros.

No tengo más que deir, y a riesgo de sonar hipócrita, os voy a decir que aunque no fuiese mi ambiente y no me sientiese agusto, estar con vosotros era aliciente suficiente.

Sin más preámbulos, vuelvo a pediros disculpas. Espero que solucionemos esto como personas civilizadas que somos. Gracias por vuestra atención.