Transmetropolitan

Se me hace raro comentar algo que no sea una película o una serie este verano. Pero sí, aparte de pegar el culo al asiento para pasar a limpio apuntes, irme de parrandeo con los amigos a ver una peli al cine, o desperdiciar horas de mi vida viendo dibujitos chinos (y colaborando en sus subtitulaciones); sí, también leo algo de cómic. Y un buen cómic, debo agregar. Esta historia de Warren Ellis (guión) y Darick Robertson (ilustración) me ha resultado impresionante. Aparte de haberme introducido con ella en la línea Vertigo de DC, me ha descubierto a un guionista que quizás, tarde o temprano, siga más de cerca.

La historia de Transmetropolitan se desarrolla en torno a las vivencias de Spider Jerusalem en la ciudad a la que vuelve, tras años autoexiliado en un retiro espiritual, abandonando su exitosa carrera como periodista tras un arranque de popularidad por sus noticias, y sobre todo, por su forma de darlas. Así, decide regresar, y volver a su rutina: escribir artículos comprometedores. Y gracias a estos artículos, su fama vuelve y continúa con su herencia. Esta vez, centrándose en la nueva campaña electoral que se avecina. Y se avecinan también tiempos difíciles para el protagonista y sus colaboradoras, Channon y Yelena. Acción, periodismo de calidad, una trama elaborada y mucho trasfondo crítico, junto con la jartá de obscenidades con las que nos salpica Ennis en sus diálogos, consiguen absorber al lector en esta interesante trama sobre moralidad social y política.

En sí, la historia me ha parecido lo más destacable, pues los excelentes personajes que se desarrollan en ella, cumplen a las mil maravillas el futuro tan desagradabe pero a la vez posible que nos ofrecen en este cómic. Un argumento muy currado para desentrañar las pesquisas de un país corrompido por el paso del tiempo y la evolución de unos acontecimientos desagradables, dando lugar a una historia de ciencia ficción impresionante, y con una calidad gráfica destacable. Agradecerle a etegoinarcadia el que me la haya dado a conocer y prestado para disfrutarla, y tenías razón: mola mil. Muy recomendable para todo aquel que no sea muy aficionado al lenguaje pulcro y a las expresiones soeces. El señor Spider Jerusalem se sentiría holgado de saber que cada vez más gente se siente interesado por sus andanzas... o no.

Y pensando en apartarme un poco de toda esa realidad de japonesadas y demás, creo que le haré caso a otro recomendador de cómic y le echaré un vistazo a Midnight Nation, de Strazinsky (uno de los actuales guionistas de The Amazing Spiderman, con bastante buena reputación). Pero claro, esto será en un largo pero constate plazo. Dentro de poco, supongo que caerá algo más.