viernes, 14 de diciembre de 2007

5º Partida de Anima

Otro episodio de las aventuritas de Fausto. Casi jugamos en mi casa, pero un allo en el cálculo de personal nos ha dado la oportunidad de volver a padecer el Comics & Coffee como centro de juego, con el ramen de Pactor y tal. En fin, dónde nos quedamos...

Ah, sí. En una cueva haciéndole FLCL a las chavalas (más quisiéramos). El mendas del brazo encadenado nos ha dejado solitos, en una especie de distorsión con el mundo de la vigilia, y nos mandó hacer fuego, cosa que hice. Mago y discípulo se echaron una cabezadita para discernir lo que ocurría, pero quedó en mero intento al ver que la deidad que nos apoyaba (y la cual se encontraron incrustada en un mar de espinas) era cargada por el tío del brazo, y desaparecía. Así, decidimos salir de la cueva (porque el master engatusó al discípulo de que no abriese un portal de transporte) y... NOBODY EXPECTS. Unos 15 sujetos de la Inquisición esperando a la salida... Y el tipo del brazo. Coge al discípulo tuneado (recordemos su modificación anterior), le machaca la cabeza, y ofrece su cadáver a la Inquisición, soltando algo de zanjar una deuda, y se las pira. Enmarronados, conseguimos convencer a la Inquisición de que no hicimos nada, somos inocentes y merecemos un voto de confianza (no sé ni cómo lo conseguimos) y nos llevarona a su fortaleza al otro lado del mundo (por otro portal, claro). Unos días de trabajo sirivieron para forzar y desbaratar los planes de la Inquisicón de manera épica: la guardia nos pide ayuda porque el discípulo resucitó, robó el libro fuente de todos nuestros males, y al final los matamos a todos (Fausto engatusó a 2 y los lanzó uno contra otro, para luego rematarlos de un hachazo. Quién pudiera en la vida real...). Así, el libro que nos vacilaba a todos, acabó inmolado por razones evidentes 8erwa un libro chivato que hablaba y decía a la Inquisición nuestra posición). Así, la torre comenzó a derrumbarse, nos teleptransportamos y el tipo del brazo nos dijo: buena jugada. Nos dio la oportunidad de descansar una temporada de Inquisición... Y va y nos borra los recuerdos... Menos mla que el mago maestro anciano y venerable escribió todo lo sucedido en sus memorias... Así que nada, reaparecemos en la isla, y viajamos al continente (Fausto ganó unas perras en el barco, jejeje) y llegamos a una nueva ciudad, en la que nos ganaremos la vida como cazarrecompensas. Una lista de 10 sujetos, y vamos a empezar por la primera presa gorda: parece ser que... Un niño. Lo peor de todo es que la recompensa son unas 4000 suculentas y relucientes monedas de oro... Viaje al pueblo, y ahí nos quedamos.

¿Encontrarán solución al misterio del niño los aventureros? ¿Conseguirán dinero para entrenar para la competición circense (cosa de la que no he hablado, pero porque paso)? ¿Fausto arruinará más marineros con juegos de azar? Todo esto y mucho más, la semana que viene (espero), y ya hasta el año que viene no habrá más partidas tras ewsta última, y aún no sé fijo si podré ir. Hasta otra partidita.

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