martes, 8 de enero de 2008

Ataque crónico de melancolía II

Qué mal me han sentado las clases hoy. Bueno, a saber. No creo que sea síndrome de vuelta al trabajo, estoy demasiado "arrutinado" como para que semejante sandez me afecte. Pero el caso es que hoy me siento algo cabizbajo. No sé, tampoco han sido tan malas. La de historia moderna universal ha roto todas mis espectativas y ha sido soberanamente magnífica. Las otras dos... normalitas. Dejémoslo así, pero bueno. Todo debe ser producto de llegar a casa y ponerme a currar en lo que no he currado por X o por Y estas navidades. Y ha sido una lectura para movimientos sociales en la edad contemporánea, el librito de mi paisano el socialista Fernando de los Ríos "Mi viaje a la Rusia sovietista".

Habiendo terminado la primera parte (que trata sobre la descripción de la estancia en Rusia, el viaje y un análisis detenido de las actividades y la sociedad que ve durante su estancia en Moscú), he comenzado con la segunda parte, titulada "la organización política", pues había un aspecto atractivo a mi gusto, la entrevista con Lenin. Craso error. Simplemente, me ha mostrado lo que no pretendía ver, pero la realidad cuando se evidencia, es demoledora. y no sé por qué cojones me ha afectado tanto. Es más, es algo que sabía y esperaba. Pero bueno, quizás haya sido más por el fuego revolucionario de Bujarin. En fin, que el caso es que tras esta lectura, y mi paseíto diario por algunos blogs que tenéis en el margen (A sueldo de Moscú, Koi-Nya), con sus últimas entradas de hoy me han dejado un poco desmotivado. Pues eso, que hoy me iré a la cama a pensar en vez de a dormir. Llevo tiempo necesitando unas vacaiones, pero no sé si eso arreglará la cosa o por el contrario me incentivará la paranoia que tengo encima. Paso de comentar nada más, que estoy poco original. Las nubes de marzo recorren mi sesera en busca de algo de lo que preocuparme aún más. En fin, qué se le va a hacer. Otra entrada emo a mi blog. Tengo que dejar los libros, o acabaré aquijotao.

No hay comentarios: